La excelencia del empleado, la otra fórmula de la competitividad


24 February, 2019

La Razón

La excelencia del empleado, la otra fórmula de la competitividad

“Una organización que quiera conseguir la excelencia de sus empleados ha de empezar por la selección para asegurarse contar con el talento adecuado para su compañía, cultura, retos y necesidades (el talento no es estándar ni funciona igual en todo tipo de compañías). Ha de contar a su vez con una cultura de la meritocracia y objetivos claros, que evalúe correctamente el desempeño y cuente con sistemas de reconocimiento. Necesita también apostar por la formación, el aprendizaje y el desarrollo de sus profesionales, porque solo cultivando la curiosidad, la capacitación, y la mejora continua podrá contar con la excelencia. Por supuesto ha de disponer de un modelo de liderazgo que genere confianza, empowerment y colaboración y un modelo de comunicación basado en la transparencia porque solo en entornos donde la gente se sienta implicada, escuchada, apoyada y partícipe, informada y alineada con los objetivos de la organización dará el 100%”. Asi se pronuncia Gema Monedero, Socia Directora de Ackermann Solutions en el reportaje que el suplemento Tu Economía de La Razón dedica a la excelencia empresarial.

“La excelencia de los empleados es condición sine qua non en la labor de los departamentos de RRHH.  La excelencia aúna capacidad y voluntad – el poder hacer y el querer hacer- e implica entrega, compromiso, dedicación, constancia, afán de mejora continua, curiosidad, colaboración y ética.   La excelencia es, por tanto, la puesta en acción del talento. Hablamos mucho de que el talento es el principal driver de las organizaciones hoy; añadiría que el talento puesto en acción, o, dicho de otro modo, la excelencia de los profesionales que componen la organización.”, añade Monedero.